Suscríbete a
ABC Cultural

POSTDATA

'Culileyentes'

En el Congreso actual, los diputados silenciosos ya no necesitan levantarse, les basta con apretar un botón

Otros textos del autor

Emilio Castelar es ejemplo de la gran oratoria parlamentaria, hoy perdida
Andrés Amorós

Esta funcionalidad es sólo para registrados

'Cuando las Cortes de Cádiz' —título de Pemán—, el ingenio gaditano creó una jocosa palabra: «culiparlantes». Calificaba a los diputados que, en el Parlamento, se limitaban a permanecer sentados, en silencio; se levantaban sólo para dar su voto, cuando así se lo indicaban: ... hablaban únicamente con el trasero. La rescataron irónicos cronistas parlamentarios como Víctor Márquez Reviriego y Luis Carandell.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación

OSZAR »