Un padre se enfrenta a 29 años de cárcel por violar y romperle el tímpano a su hija menor de edad
El acusado también suplantó la identidad de la víctima para enviar desde su correo electrónico un mensaje a la universidad en el que relataba la relación que mantenían ambos
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«Durante la adolescencia, el encausado la sometió a una situación de dominación, le controlaba las comunicaciones y la alejó de sus compañeros de clase y la familia materna». Así define la Fiscalía el sometimiento que vivió una mujer desde que tenía cinco años hasta que llegó a la universidad por parte de su padre. El tutor legal, según mantiene la acusación pública, la violó y le agredió físicamente durante casi una década.
Según detallan fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV), el ministerio fiscal solicita provisionalmente una pena de prisión de 29 años para el padre acusado de violar durante años a su hija, menor de edad, amenazarla y usar su correo electrónico para enviar mensajes.
De acuerdo con la misma información, la madre de la víctima inició una relación sentimental con el procesado cuando la niña tenía tan sólo dos años. A los cinco, el hombre la adoptó legalmente y comenzó a abusar de ella, con besos y tocamientos.
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Cuando cumplió ocho años nació una hermana de la víctima y, según relata la Fiscalía, el encausado aprovechó los momentos en que la madre estaba con el bebé para desnudar a la niña y someterla a tocamientos. Entre los diez y los doce años el encausado comenzó a agredirla físicamente «por no hacer bien las tareas del hogar», que le exigía porque la madre había enfermado, hasta el punto de romperle el tímpano de un golpe. A los doce años, comenzó a forzarla sexualmente, pese a que la menor le decía que le hacía mucho daño y que no quería. Una vez la madre fue hospitalizada, el padre le obligaba a ver películas pornográficas.
En 2021, cuando ya estaba en la universidad, la víctima decidió abandonar la vivienda. En mayo de ese mismo año, descubrió que el procesado había suplantado su identidad para enviar desde su dirección de correo un mensaje a la facultad en el que relataba la relación con su padre. Cuando la víctima denunció los hechos, un juzgado dictó la prohibición de comunicación del procesado respecto de las dos hijas. Pese a ello, el hombre mantuvo contacto telefónico con la hermana menor.
La Fiscalía le considera autor de los delitos continuados de agresión sexual, exhibicionismo, y amenazas, y de los delitos de descubrimiento y revelación de secretos, dos delitos de lesiones y uno de quebrantamiento de medidas cautelares. La vista oral tendrá lugar el próximo viernes 14 de julio en la sección segunda de la Audiencia Provincial de Valencia.
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