Ultimátum de la Conferencia Episcopal a Cremades: si en diez días no entrega el informe sobre abusos dan por incumplido el contrato
La reacción de la CEE parece responder a un nuevo retraso en la entrega de este informe, que estaba prevista para febrero de este año, pero que ha sufrido constantes dilaciones
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La Conferencia Episcopal ha dado un ultimátum al despacho de abogados Cremades & Calvo-Sotelo para que, en plazo máximo de diez días, entregue la auditoría sobre abusos en el seno de la Iglesia, que la institución le encargó en febrero de 2022, según ha adelantado Cope a través de su canal Ecclesia, que recoge la información religiosa del grupo Ábside.
En su información, y citando fuentes de la Conferencia Epsicopal, Ecclesia afirma que «si dicha entrega no se produjera en este plazo, se entendería que se han incumplido los términos de contrato, que en su presentación se estimaron en un año aproximado de duración».
Fuentes de la Conferencia Episcopal han confirmado a ABC que la existencia de esa carta, que se envió este martes 10 de octubre, por lo que el plazo expiraría el próximo viernes 20 de octubre.
Según ha podido conocer este diario, la comunicación insta al despacho de abogados a entregar el trabajo en ese plazo o de lo contrario se entendería que «se incurre en un incumplimiento de las condiciones» pactadas en la firma del contrato.
La reacción de la Conferencia Episcopal parece responder a un nuevo retraso en la entrega de este informe, que en un primer momento estaba prevista para febrero de este año, pero que ha sufrido constantes dilaciones. Ya el jueves 28 de febrero, en la rueda de prensa en que se daba cuenta de los trabajos de la Comisión Permanente de la CEE, que se había reunido los días anteriores, el secretario general y portavoz del Episcopado, César García Magán, reconocía que en la reunión contaron con la presencia «del señor Cremades y dos miembros de su equipo» que «nos han presentado la situación de los trabajos». Según ha explicado, desde el despacho «prevén entregar el trabajo definitivo en dos semanas, más o menos».
Una dilación de la que García Magán quiso desvincular a la Conferencia. «A los obispos no nos gusta el retraso y desde el despacho [de Cremades] nos han confirmado que no se debe a nosotros», afirmó entonces el portavoz, que sin embargo, no ha precisado las razones de la demora. «Por respeto a la imparcialidad, no hemos interferido y estamos esperando a que se nos entregue», añadió.
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