El Sevilla FC mira a la Real para evaluar su objetivo

Ya lo dejó caer Gudelj a título personal hace unos días en una entrevista: «Queremos volver a Europa y ganar la Copa». Ambición desmedida la del serbio, que este curso estrena brazalete de capitán. No obstante, cuando el río suena... De ahí la importancia que le da el equipo a cada victoria trabajada. El Sevilla de García Pimienta no es brillante y tiene carencias, pero es un equipo mucho más fiable que el de años anteriores. No es un mal paso para avanzar en el camino que se ha marcado. Por el momento, el grupo se ha ganado el voto de confianza de su afición, la cual lleva sufriendo los vaivenes de banquillo tanto como el propio vestuario.

La durísima derrota ante el Barcelona no ha doblegado el carácter de este Sevilla, que se plantó después en Cornellá para firmar su victoria más solvente de la temporada. Ni la lesión de Ejuke, uno de los pilares de su juego, parece haber ensombrecido el rendimiento. Tampoco lo hizo la ausencia de Saúl Ñíguez y, si juega como ante Las Rozas, Álvaro Fernández también podrá hacer que la baja de Nyland sea secundaria. Porque el Sevilla de Pimienta no son nombres individuales, sino un grupo que se va moldeando al son de las necesidades de cada envite. Durante la eliminatoria copera, el técnico sevillista usó a su equipo 'b', que dejó varias lecturas positivas, entre ellas, el estreno de Iheanacho como goleador. El nigeriano se quitó el estigma de no haber visto portería con la elástica sevillista, aprovechando la percha que le concedió un rival de categoría inferior. Hacía tres años que el delantero no marcaba dos goles en un partido y quitarse esta espinita insufla cierta seguridad a un jugador que no ha aterrizado de la mejor forma.

Ahora, el Sevilla mira al partido ante la Real Sociedad como un termómetro perfecto en el que medir sus fuerzas. El conjunto donostiarra no ha arrancado bien esta campaña, de hecho, se encuentra tres puntos por debajo de los nervionenses y ocupa el duodécimo puesto de la clasificación. Una situación anómala para un club que en los últimos tiempos no ha tenido problemas para finalizar la temporada ocupando puestos europeos.

A diferencia del Sevilla, el cuadro dirigido por Imanol Alguacil está mucho más errático en casa que a domicilio. De hecho, ha perdido en casa hasta en cuatro ocasiones y sólo ha ganado una vez en Anoeta. Las estadísticas a domicilio de los donostiarras no son mucho mejores, pero sí ha recaudado más puntos. Ante esta situación, los de Pimiena intentarán sacar partido a la irregularidad de su rival para volver a dar un golpe sobre la mesa en Nervión y certificar si este equipo está o no para aspirar a algo más que a la zona templada de la tabla. Los sevillistas están a tres puntos de los puestos europeo, que miran de reojo,pero sin perderlos de vita. Aunque en esto también influirá la enfermería, puesto que el conjunto blanquirrojo está al límite de sus recursos, teniendo en cuenta la limitada y compleja planificación llevada a cabo este verano.